Habilidades de futuro que puedes desarrollar en un alumno

19 Abr Habilidades de futuro que puedes desarrollar en un alumno

Habilidades de futuro que puedes desarrollar en un alumno

Como docente, como formador, profesor o maestro que eres, impartes una materia, una asignatura o una serie de conocimientos por los que se te ha contratado. Pero además de la materia que impartimos, nuestros alumnos aprenden de nosotros habilidades y actitudes que mostramos en nuestras clases muchas veces de forma inconsciente a la hora de impartir la materia, al interactuar con ellos o incluso en nuestra forma de responder a sus preguntas y de estar en el aula.

Independientemente de la materia, de la edad de tus alumnos, de la metodología que utilizas y del tipo de aula, hay diversas habilidades núcleo que puedes desarrollar en tus alumnos y que les pueden resultar útiles tanto en su vida personal como en su vida profesional. ¿Cuáles serían estas habilidades que destacamos?

– Constancia: capacidad de luchar por aquello que quieres o valoras como importante. En el día a día del aula pueden practicar la constancia a la hora de estudiar para un examen, un trabajo o simplemente para organizarse y acudir de forma continua a las clases.

– Autocrítica: también podemos desarrollar en nuestros alumnos una de las habilidades más potentes para cambiar aquellas situaciones que no nos gustan con “autocrítica”. Cada vez que uno de los alumnos se ve envuelto en una discusión, en un problema o ha suspendido cualquier prueba, es muy útil que les ayudemos a reflexionar sobre qué podría haber hecho distinto de modo que aprenda para próximas ocasiones en las que podría volver a ocurrir.

– Disfrutar: podemos conseguir que nuestros alumnos tengan la edad que tengan, que no pierdan o recuperen la capacidad de hacernos adultos disfrutando de las pequeñas cosas. Una puesta de sol, un cucurucho crujiente con helado de stracciatella, una ducha calentita al acabar de nadar en invierno, un aprobado después de un gran esfuerzo…cualquier pequeño detalle puede ser una opción para practicar la capacidad de disfrute.

– Curiosear: otra habilidad que les dará muchas herramientas en su futuro es la capacidad de hacerse preguntas, de investigar, leer, ver vídeos en YouTube, documentales, o hacer cualquier cosa que te lleve a aprender. Esa capacidad de mantener viva la curiosidad puede abrirles puertas en su futuro tanto para trabajar, como para viajar o incluso para desarrollarse a nivel personal.

– Comunicar: otra habilidad que será vital en su futuro, trabajen en el puesto de trabajo en el que trabajen, es la habilidad para expresar ideas en el tiempo mínimo posible y respetar a otros mientras expresan las suyas propias. La capacidad de expresarse y transmitir de forma concisa, les permitirá trabajar con sus equipos, con clientes, con proveedores o con cualquier persona con la que necesiten colaborar. A su vez la capacidad de escucha les permitirá estar abiertos a recoger de forma continua una gran cantidad de información.

– Competir: en nuestras aulas también podemos enseñarles la habilidad de competir, pero no me refiero a competir con el compañero de la mesa de delante o la de al lado, sino que me refiero a buscar la única competición sana que casi nunca nos enseñan: a competir con uno mismo.

– Agradecer y reconocer: por último, otra de las grandes habilidades que se pueden trabajar desde un aula, sería la capacidad de darse cuenta de todo aquello que le podemos agradecer a la vida, a las personas que nos rodean, a la gente con la que nos hemos ido encontrando en el camino, etc. El simple hecho de ser agradecido y reconocer a las personas que nos rodean, puede ayudarles a crear una red muy potente que les pueda sostener en momentos complicados. Una red que superaría a cualquier Facebook, Twitter, Instagram o a cualquier otra “red social”.

Estas son algunas de esas habilidades transversales que intentamos desarrollar en nuestros alumnos, independientemente que les estemos dando una formación en liderazgo, en trabajo en equipo, en solución de conflictos o a Hablar ante un público. Y para ello solo hay una herramienta, una metodología, una forma de hacerlo…¡EL PROPIO EJEMPLO!

Reme es una de esas atrevidas aventureras, de las que luchan por los sueños, una de esas apasionadas que nunca tira la toalla.