18 Oct Beneficios del juego en el aula
Beneficios del juego en el aula
Parece que cuando hablamos de juego en el aula, se dibuja en nuestra mente un jardín de infancia con niños, pelotas, música, cuentos, muñecos, cochecitos, y otros tantos objetos. Pero este punto de vista limitado, nos impide utilizar de forma profesional el juego en el aula con personas adultas.
Educativamente parece que se nos transmite que “el juego” debería estar acotado a ciertas edades y momentos de la vida y que luego “toca crecer”, madurar, y dejar aquello como un bonito recuerdo de infancia. Desde Con los Pies en el Aula pensamos que esto es limitarnos demasiado porque todavía nadie nos ha podido demostrar que el ser humano aprenda solo con seriedad, con libros, con transparencias y más transparencias. Nuestra experiencia nos demuestra cada día (incluso en los contextos empresariales más serios) que el juego es una de las mejores herramientas que tenemos para aprender por la gran cantidad de beneficios que nos ofrece. Eso sí, para el adulto el juego debe de tener sentido, debe de estar preparado previa y cuidadosamente, con un por qué, con una base que permita después fácilmente trasladarlo a su día a día profesional y con un rigor científico que nos permita sacar todo el potencial. Solo en ese punto, empezaremos a encontrar realmente numerosos beneficios al juego en un aula.
BENEFICIOS DEJ JUEGO (tanto en niños como en adultos):
a) Es un instrumento privilegiado para trabajar con grupos de personas y analizar conductas y reacciones de cada persona del grupo sin que se sientan evaluados: quién lidera, quién comunica y qué, cómo participa cada persona, qué necesidades personales y profesionales tienen, qué miedos o dificultades, cómo toman decisiones, etc.
b) Es una herramienta muy útil para ver la integración y trabajo en equipo del mismo grupo: esto permite ver cómo se organizan e interactúan a nivel grupal, cómo distribuyen sus roles y qué dificultades tienen a la hora de trabajar todos juntos.
c) Tiene un gran valor como estímulo para la creatividad: el simple hecho de crear una realidad paralela nos permite distanciarnos de muchos juicios respecto a nosotros mismos y sin darnos cuenta aparecen reacciones naturales de nuestro día a día que muchas veces son más creativas que cuando nos estamos autoevaluando.
d) Es un recurso motivador: el simple hecho de “jugar” nos permite conectar más fácilmente con cualquiera de los conceptos que estemos tratando y en ese punto es muy posible que aumente el disfrute, las risas, la diversión y la desconexión que a veces es necesaria.
e) Facilita la comunicación: bajo ese disfraz de “disfrute” es más fácil que los alumnos se relajen y que empiecen a aparecer algunos de los problemas comunicativos que tienen. En ese contexto, en el que se disminuye la tensión, es más fácil encontrar nuevos acuerdos y nuevas formas de funcionar.
f) Libera la expresión de emociones: no es preciso que todos los alumnos vivan el juego de la misma manera; unos lo pueden vivir de forma más juguetona mientras que otros lo vivirán de forma más seria, pero sea como sea, es habitual que empiecen a aparecer emociones más naturales.
g) Crea una atmósfera favorable: el ambiente que se crea permite desarrollar la confianza necesaria para posteriormente tratar temas que implican cierta dificultad o tirantez. De algún modo, el hecho de suavizar el ambiente, aumenta la probabilidad de que después se resuelva el conflicto.
h) Ayuda a la consolidación del grupo: es habitual que por ejemplo, después de una experiencia de Teambuilding o de un Outdoor, aparezcan relaciones de más profundidad entre los miembros puesto que el conocimiento que tienen entre ellos, aumenta de una forma muy natural.
Y para ti, ¿existen otros beneficios que no hemos comentado?
Reme Egea
Maestra de Educación Física, Formadora en Habilidades Directivas y Gestión de Equipos, Psicóloga, Creadora del proyecto Train The Trainers, Conferenciante, consultora y socia de Proformación S.L.
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